domingo, 2 de diciembre de 2012

Diario de Vida, Diario de Yoga

Cuando era chica, tenía como 10 diarios de vida distintos. Uno era para mis descubrimientos con las yerbas del patio, otro para comentar mis relaciones sociales, otro para desahogarme de las rabias que me hacían pasar Mamá y Papá. Y otros para cahuines varios que no recuerdo.

Siguiendo esta lógica, los diarios de vida se han mantenido y por supuesto, también existe un diario de Yoga.
Cuando chica luché porque nadie leyera mis diarios. Hoy en cambio, lo comparto por acá. 

Me da gusto darme cuenta de todas las molestias y dolencias que he atravesado. No soy la mujer de goma aún, pero me siento tan contenta de que todo esto que menciono ya no exista, o exista poquito :) A la vez, me siento orgullosa y motivada a que el avance se prolongue por el resto de mi vida.


Práctica, Semana 1:
- Noto mucha dificultad para realizar las asanas con mi lado izquierdo.
- Mi pierna derecha nunca está relajada. Tampoco mi cuello, y siento que mis hombros cargan un gran peso. 
- No me es posible estirar las rodillas sin sentir que se van para atrás. Tiritan en casi todas las asanas.
- Mis vértebras lumbares duelen, como si estuvieran pegadas con cemento.
- Mis ingles están super tiesas. En ocasiones siento dolor, como si un cuchillo me estuviera rebanando la carne.
- Mi cadera no quiere soportar el peso de mi pierna cuando la levanta. Es floja.
- Mis codos se resisten a estirarse.
- La desconcentración me desequilibra. Los pensamientos que vienen, que son todos turbulentos, hacen que mi respiración sea muy cortita. Cuando me concentro, es casi infinita.
- Al final de la práctica, sentí mucha angustia. Cada vez que abrimos el pecho sale angustia. Cuando nos torcemos, después ando toda la semana con rabia.
- Me comparo con todas las personas que están a mi alrededor. Luego me dan ganas de ponerme a llorar, pues no logro hacer muchas cosas que el resto sí hace. 
- Hicimos una respiración que hizo que amaneciera con muchos muchos mocos y que orinara mil veces durante el día.

Si de algo sirve a algún ser esto que comparto, ya me siento feliz por aquello.
Namasté!




No hay comentarios:

Publicar un comentario